domingo, 17 de octubre de 2010

Escapada por España. Barcelona. Concierto de Coldplay. Septiembre 2009.

Primera vez que viajo con Vueling. Llego al aeropuerto de Málaga con poco tiempo, pero no importa porque tengo la tarjeta de embarque ya sacada y no facturo. Así que voy directo al control de policía. Entro en las salas de espera y mientras me tomo un bocata y coca-cola. Salimos a la hora, los asientos no son muy cómodos que digamos, hay poco espacio. Llego al aeropuerto de Barcelona, el Concierto empieza a las 9.30 horas noche y ya son las 6 de la tarde. No tengo mucho tiempo. Cojo el tren de cercanías para llegar a Sans y de ahí la línea L5 para llegar al Hotel.

El Hotel es un tres estrellas, se llama Hotel Aston. La habitación huele a cañerías atascadas. Pero bueno, lo voy a usar poco, tiene Internet wifi. Cojo metro y me voy a Plaza Espanya, de ahí cogeré si puedo, una guagua que me lleve al Stadi Olimpic. Hay muchísima gente, es la primera vez que voy a un macro-concierto. El de Roger Waters en Atarfe fueron más de 35.000 personas, pero a este está previsto que asistan cerca de 70.000 personas. Parecía que iba a tardar una eternidad en coger la guagua, pero esto ha ido rápido. Se nota que Barcelona es una ciudad preparada.

Llego al Stadi y hay un poco de lío. Entre las personas que hay y que no está bien señalizado nos hemos echo un lío. Me pido una cerveza y un bocata, primer sablazo ….. 18 euros por las dos cosas. Entro al Stadi ….... IMPRESIONANTE. En este estadio se celebraron los Juego Olímpicos en 1992. Me está pareciendo ver como el arquero lanza la flecha en llamas y el pebetero se enciende. IMPRESIONANTE. 

Son las 10 de la noche y empieza el espectáculo. Hay ligeros fallos en el sonido, pero me muevo a otra ubicación en las gradas y aquí se escucha mejor. El escenario es fantástico, luces de colores que van alternándose y una gran pantalla central que deja ver la portada del CD y su título … Viva la Vida.

La gente va entrando en calor con Coldplay y va pareciéndose a un gran espectáculo. De este concierto editarán un CD que están grabando en directo. Me lo compraré. El concierto es espléndido, hay un recuerdo en homenaje a Michael Jackson, la banda toca en el centro del estadio, en un escenario pequeño, en acústico, una versión del Billie Jean. Y llega el momento cumbre, empieza a sonar los primeros acordes de ….. Viva la vida. La gente se disparata, empieza a saltar y brincar y alzar los brazos. Se enciende parte del estadio y alucino..... 140.000 brazos en alto brincando y moviéndose al son de la canción. Y 70.000 voces gritando al unísono oooooooooohhhhh, ooooooohhh ..

Alucino, es el espectáculo más grande que he visto hasta ahora. Chris Martin chapurrea el español, y nos invita a hacer la ola, con las pantallas de nuestro móvil. A la segunda nos sale y lo hacemos durante cinco minutos, lo que dura una canción. Son las 12 de la noche, se acabó el espectáculo. Dos horas de buena música. Y un concierto para no olvidar aún con sus pequeños defectos de sonido.

Me he levantado a las 9 de la mañana y después de desayunar, he salido hacia la villa olímpica y el puerto olímpico. Quiero dar un paseo por las zonas en donde estuvieron en 1992 aquellos atletas que nos pusieron la piel de gallina a más de uno, y a mi en particular. “Las mejores olimpiadas de la historia”, dicho por Juan Antonio Samaranch. Llego al parque Carlos I y de ahí diviso la torre Mapfre y  el hotel. Llego a la plaza de los voluntarios, y comienzo a dar un paseo por la avenida en la que comienza la villa olímpica, con los tropecientos mástiles de bandera, apuntando a lo que tuvo que ser un gran espectáculo.

Después cojo una bocacalle y llego al puerto deportivo, ahí está la estatua encima de la cafetería que hizo Miquel Barceló, la llamaban la cigala. Me doy un paseo por el puerto deportivo y me siento en una de sus terrazas para tomarme una cerveza. Estoy contemplando lo que fue el germen del olimpismo de Barcelona 92. Los pelos se me ponen como escarpias. Siento lástima de haberme perdido aquellas olimpiadas, aunque las seguí muy atentamente por la tv.

Cojo metro y me voy hacia el museo Picasso y hacia la Iglesia de Santa María. La Iglesia no la puedo ver porque está cerrada y su fachada está en restauración, con lo que ni una solo foto puedo hacer. Entro en el museo Picasso. Aunque ya lo vi hace muchos años en una ocasión que mi tío Benjamín me trajo, me sigue pareciendo impresionante. Ver diversos cuadros me alucina, y me gustó especialmente la serie de las meninas que hizo Picasso con su visión del cuadro de Velázquez. No sé si la madurez me hace descubrir cosas que no son tan obvias pero me alucina como Picasso mezcla en la serie los 5 colores de sus dos patrias y dos ciudades, Málaga-Barcelona, Andalucía y Cataluña. La mezcla del verde, el blanco, el rojo, el amarillo y el azul. Hacen prever la simbología existente en sus cuadros con sus dos tierras.

He visto que hay una exposición en el museo Maritim dedicada a Tutankamon y como es única decido ir a verla. Hay una gran cola para entrar, la entrada también es cara, espero que valga la pena. Después de una hora de cola, entro. La audio guía es gratuita. Es una mezcla entre vídeos y reproducciones de los tesoros y alhajas que habían dentro de la tumba de Tutankamon. Está muy bien ambientada e históricamente da claves muy importantes de los últimos descubrimientos realizados sobre este faraón que murió muy joven. Me ha gustado por los relatos contados mediante la audio guía. Pero no dejo de pensar que 16 euros para ver copias me parece muy fuerte.

Regreso al hotel, descanso un poco. Y como tengo los pies destrozados de tanta cola, decido ir a cenar a algún sitio cerca del hotel. Voy a una pizzería. He comido muy bien. Me acuesto temprano porque no me funciona el wifi en la habitación. Que mierda de hotel, para presentar una queja. No puedo fumar, sus cañerías huelen a mierda y encima no funciona el wifi.

Me he levantado tarde, son las 10 de la mañana casi. Desayuno y salgo a dar una vuelta, quiero ir al Parallel y a plaza Catalunya. Almorzar por esos alrededores y continuar mi viaje hacia Málaga. Me agrada mucho Barcelona, aparte de por la ciudad, es el ambiente que se respira. Hay muchas culturas mezcladas y conviviendo, hindúes, latinos, sudamericanos, chinos, vietnamitas, catalanes, y encima reciben la visita de los turistas como yo. Doy un paseo por el Parallel y me tomo una cerveza en una cervecería sentado en la terraza.

Me dí una vuelta por las Ramblas y vi la entrada del Mercado de la Boquería, tan de moda ahora por ser un prostíbulo al aire libre y por las redadas que ha echo en este fin de semana la policía y los mossos de escuadra. Fui hacia la catedral y entré a almorzar en una tasca vasca, he comido pinchos. Muy ricos como siempre.

En este momento estoy escribiendo en el aeropuerto del Prat esperando que un avión me lleve de regreso a Málaga. Si no hay nada más que contar, acabo el relato de mi escapada a Barcelona del fin de semana.

Fotos: Concierto Coldplay y "El pez dorado" Miquél Barceló.
Líneas aéreas: Vueling.

3 comentarios:

  1. ¿¿¿¿Pero llegaste a ver algo, muchachito??? ¡Isús, la distancia...! ¡Qué pasada!

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  2. Si, si se ve. Al principio estaba entre las dos pantallas de tv, muy cerca del escenario. Pero el sonido distorsionaba mucho, y se oía un zumbido. Por eso me retiré al comienzo de la grada. Ahí, el sonido era mejor, no llegaba el zumbido y no distorsionaba. Y si fue una pasada, de verdad.

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  3. (Me acuerdo de que me llamaste con un subidón...!! :">)

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