La ruta de las civilizaciones. El sorprendente y fascinante Perú. Noviembre - Diciembre 2004.

La siguiente parada en la ruta de las civilizaciones fue Perú, los Incas. Pueblo precolombino que deseaba conocer. Fueron 15 días de ensueño, con un recorrido algo pesado y cansado, pero maravilloso de hacer. 15 días recorriendo Arequipa, Reserva Aguada Blanca, Cañón del Colca, Juliaca, Puno, Lago Titicaca, Cuzco, Pisac, Ollantaytambo, Yucay, Machu Picchu y Lima. Me paro un segundo ya que este viaje tiene otro sabor especial, este viaje lo hice gracias a una persona, mi padre. Y a su recuerdo se lo dedico.

Perú es un país también con una planta hotelera de ensueño. No le tiene nada que envidiar a ningún país de los llamados ricos. Casi todo el tour lo realizamos en los hoteles de la cadena Sonesta y también estuve en el Colca Lodge, Pueblo Hotel Inkaterra (Machu Picchu), en Novotel Cuzco y Hoteles Libertador Cuzco. Destacar algún hotel me cuesta. Ya que todos son buenísimos y todos de 5 estrellas, pero destaco el Colca Lodge y el Pueblo Hotel Inkaterra. El Colca Lodge por lo apartado que está del mundo, tanto que no llega señal de TV y menos de teléfono (fijo o móvil), un paraíso para el descanso en medio de la cordillera del Colca. Y Pueblo Hotel Inkaterra en Macchu Picchu por ser un hotel íntegramente ecológico, realizado todo con materiales reciclados y con propia producción de toda clase de vegetales y frutas de un invernadero propio. Dentro del hotel hay dos reservas museos, una de mariposas con 108 especies distintas y otra de Orquídeas propias del Macchu Pucchu, tienen 372 especies distintas.

Después de 12 horas de avión desde Madrid, llegué a Lima, ya de noche. Paso los controles de pasaporte y aduanas, y me esperaba en el aeropuerto la guía principal del tour. Ahí llegó la primera sorpresa, el grupo lo formábamos solo dos personas, José Luis y yo, dos hombres que viajamos solos. Pero tengo que reconocer que el tour así es hasta casi mejor. Teníamos a los guías locales solo para nosotros y la atención fué magnífica. Después de hacer noche en Lima, en la mañana salimos en vuelo de otras dos horas más para Arequipa.

Arequipa es una ciudad en las faldas de los Andes que conserva las casas palaciegas e iglesias de la época colonial. Toda la arquitectura es una mezcla muy original entre el barroco italiano, el plateresco español y la originalidad andina. Los palacios e iglesias están construidas de sillar, un material de origen volcánico petrificado de color perla, por eso se le llama  "Ciudad Blanca". Arequipa está situada a 2.350 m de altura y rodeada de tres volcanes que la media rondan los 5.000 m de altura, el más conocido el Misti. Al ser una zona volcánica es una zona proclive a terremotos, ha habido más de uno en su historia. Con la guía recorremos el casco histórico de la ciudad  y visitamos la Plaza de Armas, La Catedral, La Iglesia de la Compañía y El Monasterio de Santa Catalina. Nos cuenta la historia de la ciudad desde la colonización por parte de los españoles hasta la independencia. Me ha gustado mucho. Su gastronomía es muy peculiar y he probado en "las picanterías" (restaurantes) carnes que nunca había probado como los conejillos de indias y la alpaca. Carnes muy sabrosas, acompañados de muchas especias y que no falte la papa (tienen más de 2.000 tipos distintos de papas) y el choclo.

Al día siguiente nos encaminamos hacia el Cañon del Colca, en medio del viaje visitamos la Reserva de Aguada Blanca (mayor reserva andina de Llamas, Vicuñas y Alpacas), las cuevas de Mollépunku con pinturas y grabados prehispánicos y pasamos por delante de los volcanes Misti y Chachani, impresionantes volcanes, de más de 5.000 metros de altura. Aquí empieza el verdadero tour, el recorrido lo hacemos en un Santana y por carreteras sin asfaltar llenas de baches y piedras en el camino. Tengo que reconocer que  el viaje es muy duro y muy cansado pero lo que vas viendo por el camino es tan maravilloso que se te olvida lo malo que es el viaje. En el camino nos paramos en una granja que tiene Intervida y podemos comprobar la maravillosa labor que hace esta ONG. Llegamos al Colca y tenemos la oportunidad de disfrutar de unas piscinas naturales termales al aire libre y de un reparador baño después del tormentoso camino. Aunque estamos a finales de la primavera austral, a 4.000 metros de altura hace un frío de tres pares de narices (ya me pueden ver en la foto estaba helado). Con muchísimo frío disfrutamos del baño reparador en las piscinas termales, como auténticos marqueses. Cenamos y disfrutamos de las maravillosas estancias de este Lodge. Por cierto, este Lodge fue innagurado por la Reina de España, Sofía.

Por la mañana del día siguiente salimos hacia la Cruz del Colca, las vistas son impresionantes, e intentamos ver el vuelo del cóndor. Ave andina que es autóctona de estos parajes, y que no es frecuente que vuele ante tanta gente. Según comentan los que estábamos, el cóndor realizó el vuelo, pero reconozco que no lo vi, estaba haciendo la foto y encima estaba volando muy lejos de la posición en donde estábamos. Visitamos dos pueblos Maca y Pinchollo. Maca es un modesto pueblo que hace unos años resistió a la terrible sacudida de un terremoto que devastó gran parte de las construcciones del pueblo. Con fondos del estado español en ayuda a esta zona se está restaurando la iglesia y parte de las casas del pueblo que fueron totalmente devastadas. Hace un año vino la Reina por aquí y visitó las obras de restauración, cuando vino a ignagurar el Colca Lodge. La gente es muy amable y está muy agradecida por la ayuda española para la reconstrucción de su pueblo. En Pinchollo descubrimos un mercadillo del agricultor en donde nos dieron una charla sobre los diversos tipos de papas que cultivan, más de 2.000 tipos, muy interesante. Son pueblos muy modestos de gente muy humilde, pobre, pero en absoluto vi miseria, así como si vi miseria en Lima.

Tenemos libre la mañana del día siguiente y José Luis y yo lo dedicamos a pasear el centro histórico de Arequipa. Paseamos por la Plaza de Armas y nos adentramos en las calles de los alrededores. Arequipa es una ciudad preciosa y digna de conocer. Por la tarde salimos en avión con destino a Juliaca, población cercana al Lago Titicaca, que es el próximo destino.  Llegamos al lago Titicaca y nos alojamos en el hotel, que está al mismo borde del lago. desde la terraza de la habitación podemos ver la orilla del lago a apenas diez metros. Una pasada.

Después de desayunar nos subimos al barco que nos llevará por el lago hasta las islas flotantes de los Indios Uros. Islas que están echas de  totara una especie de junco que flota en el agua. También construyen en este material las casas y las estancias comunes de las islas. Es una pasada, ¿como es posible que las islas, tan grandes como puede ser una plaza de cualquiera de nuestras ciudades, se puedan mantener flotando sobre el lago?. Soportando el peso de todo lo que construyen encima. Viven del turismo y se dedican a vender artesanías que realizan ellos mismos. Yo compro un tapiz. Al finalizar la visita ocurre el accidente de José Luis, al entrar al barco. Se resbaló y se fue de bruces contra el piso del barco. Se ha dado un golpe importante, y tenemos que ir a un hospital en Juliaca para que lo puedan atender. Unas magulladuras y unos cortes han sido el resultado, por suerte José Luis está bien.


Todo el día siguiente lo pasamos viajando desde Puno hasta Cuzco, en tren. Un tren explotado por el Orient Express, tren de lujo que ofrece muchas comodidades, incluido un vagón panorámico. Pasamos todo el altiplano, y podemos comprobar lo hermoso que es esta zona del país. Pasamos montañas nevadas, con manantiales de agua caliente procedente del subsuelo volcánico, grandes valles con hermosos pueblos del altiplano. Llegamos a Cuzco casi de noche, Cuzco fue la capital del imperio Inca. Visitamos el casco antiguo con su plaza de armas, la catedral, el ayuntamiento, etc, todas las construcciones son exactamente igual que las que visitamos en Arequipa. Son construcciones típicas del siglo XVII y XVIII español con mezcla autóctona. Cerca de Cuzco está situada Pisac, el Valle sagrado de los Incas, Ollantaytambo y Yucay. En donde hay que destacar el mercado de Pisac, y los asentamientos indígenas de Ollantaytambo, únicos en su género, junto con la fortaleza que visitamos y el templo principal.

Volvemos a coger el tren para ir hacia el pueblo de Machu Picchu. Subimos la montaña en guagua por la ruta zig-zag hasta la cima, en donde visitamos la ciudad perdida de los Incas, el Machu Picchu. No tengo palabras para explicar lo que sentí. La ciudad es algo impresionante, está en ruinas pero te explican como los Incas hacían su vida en este lugar, liderado por Pachacutec, situado en lo alto de la montaña para poder tener acceso directo y más cercano a su Dios. Las construcciones, templos, casas, lugares de reunión, todo, lo imaginas tal y como hace más de 500 años fueron utilizadas por los Incas. Maravillosa visita de esta ciudad santuaria de los Incas, incluida el cerro Huayna Picchu (montaña que parece el perfil de la cara de un hombre). Es algo maravilloso y digno de visitar y no perder la oportunidad de disfrutar. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, una de las diez maravillas del mundo y descubierto por el historiador americano Hiram Bingham en 1911. En este lugar se respira PAZ, se respira tranquilidad. No sé si es que iba a visitarla predispuesto a sentir PAZ pero puedo afirmar que ha sido uno de los mejores momentos que he sentido en mi vida. Sigo sin tener palabras para describirlo, las busco pero no las encuentro. Bajamos al hotel y disfrutamos de una visitas a los dos museos que hable al principio del post.

Al día siguiente salimos de nuevo para Cuzco. En Cuzco visitamos más profundamente el casco antiguo y visitamos la catedral, construida sobre el palacio Inca de Viracocha, la iglesia de Santo Domingo, antigua Koricancha Inca (templo del sol). Y visitamos en los alrededores los centros arqueológicos de Kenko, Tampu Machay, Puka Pukara y Sacsayhuaman.  Aparte de comentar que todo lo que vi me encantó, lo que más me gustó fue Sacsayhuaman, con sus murallas de bloques encajados, nos cayó una tormenta de mil par de narices, teniendo que resguardarnos en muchos momentos de la visita.


Cogemos otro avión y volamos hacia la última parte del viaje, Lima, la capital de Perú a orillas del Océano Pacífico. Lima tiene un clima especial, muy parecido a la panza de burro del Puerto de La Cruz. Allí visitamos la ciudad, su casco histórico, la plaza mayor, la catedral (donde está enterrado Francisco Pizarro), el Palacio de Gobierno, el Arzobispado, el Palacio de Las Torres. Y visitamos los barrios de San Isidro, con su "Olivar" y Miraflores, con la plaza del amor y las preciosas vistas de las inmensas playas que tiene Lima. 


Con esto terminé quince días de ensueño, un viaje inolvidable. Algo para disfrutar y recordar toda mi vida. Perú, un viaje sorprendente pero un país maravilloso.


Documental sobre Machu Picchu.


Fotos: Machu Picchu, "Grupo" en Arequipa, Volcán Misti, Islas Flotantes Uros, Ollantaytambo y Catedral de Cuzco. 


Enlace: Documental sobre Machu Picchu en "Youtube". Consta de 5 partes, te recomiendo que veas las 5 partes, vale la pena. 


Mayorista: Nobel Tour. Líneas Aéreas: Iberia y LAN.