Escapada por España. Úbeda, Baeza y Jaén. Tierra de olivos y ciudades medievales. Diciembre 2007.

Estoy escribiendo la última escapada del 2007, las ciudades de Úbeda, Baeza y Jaén. Tierra de aceituneros, tierra del aceite de oliva. Úbeda y Baeza han sido declaradas Patrimonio Cultural de la Humanidad por parte de la UNESCO  en el año 2003. Gracias a que estas ciudades históricas conservan de una manera exquisita edificios, palacetes, iglesias y conventos de estilo renacentista, destacando el excelente estado de conservación de los elementos de adorno de las calles principales de su centro histórico. En estas ciudades se rodó gran parte de la película Alatriste, así que si quieren disfrutar de ellas sin visitarlas, vean la película que muestra los bellos rincones que tienen estas dos ciudades.

Fuimos un grupo de 4 personas, y allí nos reunimos con Esmeralda y Jesús que viven en Jaén. Así que fuimos 6 personas las que paseamos las calles de estas ciudades y descubrimos el excelente comer en sus tascas. Nos quedamos en el Hotel Ímora de 4 estrellas, un muy buen hotel situado en las afueras de Jaén. 

El sábado por la mañana cogimos coche y nos desplazamos a Úbeda. Llegamos a la ciudad y aparcamos el coche en un aparcamiento a las afueras de la ciudad que da hacia los famosos Cerros. La verdad es que las vistas son impresionantes, ese valle lleno de olivos que se junta con los cerros dan una visión muy bella de estas tierras. Cerros famosos por el refranero, "ya me fui por los cerros de Úbeda". Según la wikipedia proviene de la época de Fernando III cuando uno de sus capitanes, Álvar Fáñez, desapareció instantes antes de entrar en combate y apareció después de la reconquista de la ciudad. Y al ser preguntado por el Rey, él le contestó que se había perdido por los Cerros de Úbeda. Se tomó a guasa y se quedó como frase que significaba cobardía. 

Paseamos por toda la ciudad y pudimos disfrutar de las maravillosas plazas y de los palacetes que se conservan, es como irte hacia los siglos XVI, XVII de nuestra historia. Visitamos la Iglesia de San Pablo, la plaza del Ayuntamiento en donde se encuentra el Palacio de las Cadenas, sede del Ayuntamiento, precioso palacio renacentista y la Real Colegiata de Santa María de Los Reales Alcázares, construida en 1233 tras la reconquista de la ciudad por Fernando III. Es una construcción que mezcla todos los estilos arquitectónicos, gótico, mudéjar, renacentista, barroco y neogótico, ya que se empezó a construir en el siglo XIII y ha tenido sucesivas restauraciones y construcciones nuevas hasta el siglo XIX. Hoy por hoy se encuentra cerrado ya que se descubrió hace 30 años que su estructura presentaba una inclinación que le hace inestable. Tras varios años de obras mal orientadas en busca del problema, se ha descubierto hace poco que su problema está en los pilares principales del edificio. Todavía está en obras.

Después pasamos a la Plaza de Vázquez de Molina, en donde se encuentra el Palacio de Deán Ortega, actual parador de turismo, palacio renacentista y junto a ella está la Sacra Capilla de El Salvador, que es propiedad de la casa Ducal de Medinaceli, y es una iglesia panteón renacentista. Es el símbolo de la ciudad, fue construido por Diego de Siloé, el mejor aquitecto escultor del renacimiento español en 1536. Francisco de los Cobos, secretario imperial de Carlos I de España y V de Alemania lo encargó para ser su panteón privado, y aquí se encuentra enterrado. Este panteón es una de las joyas más importantes que existen en España. Fue realizado y decorado por los mejores profesionales de la época, Siloé, Alonso Berruguete, Esteban Jamete, y no desestimaron esfuerzos para que tanto el interior como el exterior sea una auténtica joya de la arquitectura. Tiene un pórtico plateresco impresionante, y una cúpula en forma de cebolla al estilo de las iglesias y catedrales centro europeas que no era común en España en aquellas épocas. Es un monumento precioso y que no debes perderte el visitarlo. En el centro de la plaza existe una fuente veneciana preciosa y frente a ella se acaba de empezar a desenterrar los restos del Palacio de Orozco de origen medieval.

  

De ahí fuimos hacia el centro comercial de la ciudad y como empezó a llover y se acercaba la hora del almuerzo nos metimos en una tasca. No me acuerdo del nombre lo que si puedo decir que el vino corrió a raudales y los platos de gambas, langostinos, jamón, etc, también. Y fue baratísimo. No llegó ni a 10 euros por cabeza, comimos de maravilla. Después del café cogimos coche y nos dirigimos a Baeza. Baeza es otra ciudad medieval preciosa y que no hay que perderse. Es una de esas ciudades que sales maravillado después de visitarla. Tiene un centro histórico que es una auténtica maravilla, paseando en ellas te desplazas a la edad media de España. Es algo que no se puede describir con palabras, hay que verla.

Al llegar a Baeza nos encontramos por casualidad con Lola, que había venido con un grupo de amigos desde Elche. Estuvimos tomando un té en una tetería juntos unas horas. Hasta que nos separamos para ir nosotros a visitar la ciudad. Como es invierno, nuestra visita es de noche. Al ser de noche hace la visita mucho más indescriptible, ya que los palacios, plazas y fuentes se encuentran iluminados, dándole un toque más especial si cabe. Lo malo, las fotos, mi cámara saca unas fotos horrorosas de noche, y me salieron muy movidas y otras totalmente a obscuras.


La visita la iniciamos en la plaza del Pópulo, en la fuente de Los Leones, preciosa fuente que fue trasladada desde la ciudad Íberoromana de Cástulo y simboliza el orgullo de haber sido elegida la heredera de ésta ciudad. Desde ahí nos dirigimos hacia las antiguas Carnicerías, La Audiencia Civil (edificio plateresco), El arco de Villalar, la antigua Universidad, hasta que llegamos al Palacio de Jabalquinto (emblema de la ciudad y edificio plateresco). Precioso palacio así como los paseos por sus estrechas calles de piedra, iluminada por quinqués de hierro y ventanas enrejadas en hierro forja en todos los palacios que vimos en el paseo. Llegamos a la Catedral de Baeza, preciosa catedral construida sobre una antigua mezquita, de estilo renacentista. Estuvimos también en la Fuente de Santa María situada en la plaza entre la Catedral y el Seminario de San Felipe Neri, en donde hay un triple arco triunfal romano. Todo algo espectacular. También estuvimos en la casa en la vivió aquí Antonio Machado, poeta que estuvo destinado en el instituto universidad varios años. 

En fin, que aunque disfruté mucho de esta visita nocturna, debo volver a esta maravillosa ciudad para visitar todos y cada uno de los palacios en su interior, ya que me quedé con muchas ganas de visitarlos. Al día siguiente nos tocaba la visita a Jaén capital. También tiene muchos rincones preciosos entre los que cabe destacar, la Catedral. La Catedral de La Asunción de Jaén es una preciosa Catedral de estilo renacentista, en la que guarda en su interior innumerables obras pictóricas importantisimas. Aparte de ser una construcción preciosa. Aspira a convertirse en Patrimonio de la Humanidad. Jaén también tiene muchas plazas que descubrir y visitar entre las que destaca la Plaza del Lagarto de Jaén. Dedicada al lagarto y a su leyenda. La leyenda cuenta que existía un lagarto en el barrio de La Magdalena que asustaba a todo aquel que hiciese ademán de acercarse a los chorros de la fuente en busca de agua. Le pidieron al Rey que enviase a alguien para deshacerse del lagarto. Y un preso se ofreció a cambio de su condena, pidió la piel de una oveja, pólvora, panes y un caballo. Le tiró los panes al lagarto que se lo comió, y después le tiro la piel de la oveja con la pólvora en su interior. Al cabo de unos minutos el lagarto explotó, el pueblo se libró del lagarto y el preso recuperó su libertad. También visitamos el Palacio de Villadompardo, es un Palacio de estilo renacentista que construyó Fernando Torres y Portugal. El Palacio hoy es sede de tres instituciones, el Museo Internacional de Arte Naif, el Museo de Artes y Costumbres y los Baños Árabes de Jaén. Precioso palacio, no dejen de visitarlo.


Un fin de semana precioso visitando unas ciudades maravillosas a las que tengo que regresar, ya que me falta por visitar los interiores de los palacios de Baeza, que deben ser una auténtica maravilla.


Fotos: Sacra Capilla de El Salvador (Úbeda) ;  Plaza del Pópulo y fuente de Los Leones (Baeza) y Catedral de La Asunción (Jaén).